Calma

Imago III


Escuchando: David Gray – Please forgive me

No he podido apartar a Imago de mi vida, de verdad que lo he intentado, pero no puedo pelearme conmigo misma. Le miro desde lejos, le sueño, y cuando le tengo cerca todo mi cuerpo me grita que le necesito, que me acerque, que lo sienta, y es entonces cuando un roce, un cruce de miradas me estremecen, y desde ahí, desde mi mundo, Imago es hermoso, inalcanzable, y yo tengo algo en lo que pensar cuando estoy detrás de la barra y el día es gris.

Please forgive me if I act a little strange,
for I know not what I do.
Feels like lightning running through my veins,
every time I look at you.

Hoy llovía, dentro y fuera, y yo he escrito su nombre en una servilleta de papel y la he guardado en mi bolsillo, debajo del delantal, mientras servía cafés con sonrisas. De vuelta a casa he ido por el camino mas largo, el que sube por detrás del parque, donde el viento era tan frío que helaba las lagrimas debajo del casco de la moto, entonces, mientras iba todo lo rápido que podía para dejarme atrás, he metido la mano en el bolsillo y le he tirado, arrugando todas las letras en mi mano y despidiéndole con un beso por el retrovisor, lejos, antes de que empiece a ser demasiado tarde…

Help me out here
all my words are falling short
and there's so much I want to say.
Wanna tell you just how good it feels
when you look at me that way…

He llegado a casa vacía… me gustaría decirte tantas cosas, pero tú lo sabes ¿verdad? Dime que lees en mis ojos, que escuchas entre líneas, que no he vuelto a caer en un absurdo de imaginarme que tengo y que no soy, dime que existes fuera de mis sueños, que sientes como entras en mi mundo, dime que eres mas que un pensamiento inconsistente al que agarrarme, y déjame abrazarte, solo una vez más, estoy demasiado cansada...

Please forgive me,
if I act a little strange...




NOTA IMPORTANTE: Creo que ya tengo una edad como para ponerme falda plisada y calentadores. Sé que no tendría que ir así a trabajar, pero bueno, también sé que no debo enamorarme de desconocidos y lo sigo haciendo. Esta vez Imago se ha reído de mi, a carcajadas, aunque lo mejor es que yo también me reído con ella. No habíamos ni pedido nuestro primer café juntos cuando me ha rechazado, ¡sin saber que lo estaba haciendo! creo que aun soy capaz de disimular la locura, también creo que tiene la sonrisa mas dulce que he visto, que yo soy mas tonta de lo que pensaba y que en el trabajo estoy mejor sola que acompañada.


Del blog:


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