Sin daños a terceros
martes, 12 de octubre de 2010
Justamente ahora
irrumpes en mi vida
con tu cuerpo exacto y ojos de asesino.
Tarde como siempre,
nos llega la fortuna.
Tú ibas con ella,
Yo iba con él,
jugando a ser felices por desesperados
por no aguardar los sueños,
por miedo a quedar solos...
pero llegamos tarde,
te ví
me viste
nos reconocimos enseguida pero tarde
maldita sea la hora
que encontré lo que soñé,
tarde.
Tanto soñarte y extrañarte sin tenerte
tanto inventar
tanto buscarte por las calles como loca
sin encontrarte
ahí va una de tonta
por desesperada
confundiendo amor por compañia
y ese miedo idiota de verte vieja y sin pareja
que hace escoger con la cabeza lo que es del corazón.
Y, no tengo nada contra ellos,
la rabia es contra el tiempo por ponerte junto a mi, tarde.
Ganas de huir,
de no verte ni la sombra,
de pensar que esto fue un sueño o una pesadilla
que nunca apareciste,
que nunca has existido.
Ganas de besarte,
de coincidir contigo,
de acercarme un poco y amarrarte en un abrazo
de mirarte a los ojos y decirte: Bienvenido...
Pero llegamos tarde.
Te ví,
me viste
nos reconocimos enseguida pero tarde
quizás en otras vidas,
quizás en otras muertes.
Que ganas de rozarte,
que ganas de tocarte
y acercarme a tí
y golpearte con un beso,
de fugarnos para siempre
sin daños a terceros...
(Ricardo Arjona)
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2 Gotas de Lluvia sobre mi Paraguas Rojo:
Difícil enamorarse cuando el corazón está hipotecado...sin causar daños a terceros.
Y que lo digas ElAinKa...a mí me ha pasado y es muy doloroso.
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